En una sociedad agrietada y cada vez más fragmentada, donde la unidad de los diferentes sectores populares se hace cada vez más inviable, algunos grandes relatos como la Revolución o la Cultura Rock se fueron alejando paulatinamente de la realidad, para convertirse en grandes mitos que sirven de reservorio y plataforma ética para aquellos que no nos resignamos a aceptar que las relaciones humanas deban ser como son, sin existir ninguna alternativa al respecto, y a la vez, sostenernos algo inmunes con respecto a la mediocridad reinante que cada vez se instala con mayor verosimilitud alcanzando un rango de casi natural. La mediocridad no sería efectiva sino se negara a sí misma permanentemente, tratando de mostrar que no es mediocre, valga la redundancia, y es por esto mismo que los espíritus no críticos la aceptan como si fuera un dato de las ciencias naturales.
La impronta de la cultura rock, no fue cualquier impronta, sino aquella que emergió a mediados de los sesenta cuando en el mundo soplaba un viento que no había soplado nunca, ese que Bob Dylan entonaba en “Blowin´ the wind” y que fue una hondonada de aire fresco que llegó a cuestionar al Establishment en todos sus cimientos. Nunca un sistema dominante fue tan cuestionado y sospechado como en aquellas épocas, y nunca se soñaron tantas alternativas de Humanidad como en aquellos tiempos.
Es posible que cierto dogmatismo revolucionario, no haya podido interpretar nunca toda la subversión que implicaba la emergencia de la cultura rock, y también supongo que aquel frustrado intento de Mick Jagger de llevar al rock de los Stones a la República Popular China en medio de la gran Revolución Cultural representaba una visión acertada, y no como algunos llegaron a decir que con esto se intentaba meter al capitalismo mediante el rock
Por aquellas épocas el gran John Lennon se escurría del consumo de drogas, y comenzaba a ver la realidad de otra forma, veía que la visión psicodélica si bien necesaria, no alcanzaba para entender por ejemplo el racismo en Estados Unidos y que el rock no era una mercancía, y que él mismo no era ni un músico exitoso ni un burgués sino simplemente un “Working class hero”, un héroe de la clase trabajadora, tal como rezaba uno de los temas grabados con la Plastic Ono Band en 1970. Otro tema también fue “Power to the people” en clara alusión a la consigna principal de la revolución cultural china donde se planteaba todo el poder al pueblo.
Igual que hoy igual que siempre, Estados Unidos es una superpotencia que pone grandes fichas a las guerras, siempre que no sean en su territorio, pero nunca existió en ese país un movimiento antibelicista como lo fue el movimiento hippie en los 60- 70 en oposición al envío de tropas a Vietnam, que dicho de paso implicó para la nación del norte su máxima derrota militar. Si bien el hipismo levantó las consignas de Amor y Paz siempre recuerdo una entrevista realizada por la Revista Pelo a Country Joe Mc Donald en el norte de Chile durante el gobierno de Salvador Allende en el país trasandino. El célebre hippie y músico de folk y acid- rock que la mayoría por acá descubrimos en la película Woodstock donde entonaba aquel himno llamado “I feel like i´m fixing to die rag” donde se oponía visceralmente a la guerra del sudeste asiático, este músico le decía a Pelo en Chile del 72, que para cambiar la sociedad no alcanzaba con el pacifismo. En la actualidad Country Joe nos dice que Bush es el responsable de inventar cierto tipo de terrorismo y meter a su país en aventuras militares, y hagamos la salvedad que hoy no hay un movimiento juvenil de oposición a ello como fue el hipismo.
El rock o mejor dicho su cultura, nunca fue parte del poder. Cuando el rock es solamente visto como un género se convierte en una mercancía y por esto se transforma en Pop. Surgió de la revuelta juvenil de los años sesenta y se extendió a todos los sectores populares, haciendo que ese elemento afro original sea una respuesta efectiva contra la opresión.
En una sociedad dividida, hipócrita y que cultiva la mediocridad que ofrecen los mass media, la cultura rock si bien casi extinguida al menos debe mantener la dignidad original para servir de espejo válido para las nuevas generaciones.
7 comentarios:
Creo q rock lamentablemente esta sobreviviendo gracias al under. se acabaron las apocas en q los musicos eran reconocidos por expresarce.
Hoy en dia logran "reconocimiento" aquellos q llegan a la "92.1" donde no exigen buenos musicos y mucho menos arte.... q mejor q tener un drogadicto cantandole a una bateria de 9v.. pero bueno drogadictos eran los de antes.. jaj hendrix,morrison, etc q cambiaron millones de craneos haciendo q más de uno estudie un instrumento para superarce dia a dia pero esa es otra historia .....
Cualquier comentario que pudiera hacer sería redundante,sabés de memoria que pensamos y sentimos igual loco,simplemente pudo decir...!!!BRILLANTE!!!!
Un abrazo Iron
Muy Buen enganche Osvaldo, el rock, la sociedad y la política, en chico tema te metiste.
Pero bueno alguna vez debemos empezar a poner en claro algunas cuestiones.
Es una mirada crítica y a la vez acertada de la realidad que hoy padecemos.
Tal vez como están hoy las cosas, la mediocridad de la cual vos hablas es la única realidad que vivimos, y muy a nuestro pesar sabemos íntimamente que el futuro no será mejor.
El rock y el movimiento hippie de los 60 esta claro que fue la generación de una respuesta a los sistema dominantes que imperaban en ese entonces.
Y también es verdad que el dogmatismo revolucionario no supo capitalizar, o tal vez desecho esta revolución cultural que no manejaba masas, sino que integraba seres humanos.
Pero esos espacios dominantes entendieron muy bien el mensaje, y lograron como vos decís vender al rock como una mercancía.
Por eso es verdad que aquellos que transitamos ese cultura rock no debemos dejar que se extinga como tal y mantenerla viva para las generaciones posteriores.
No nos olvidemos que en este país fuimos participes de cambios sociales y no solo la política y socialización nos unió, sino también el rock como parte de una necesidad de cambios. (Sabemos de que estamos Hablando los dos)
Igual es nuestra responsabilidad hacer conocer estas cuestiones a quienes viven bombardeados por mediocridades y realidades echas a medida del consumidor enviadas por los poderes de turno.
segui adelante con esto, nos hace falta este tipo de discusion mas seguido
un cuidate grande
Anibal
Querido Osvaldo:
Yo creo que a este saludable y brillante debate le está faltando un "pequeño" gran detalle...
Se va dejando de lado cada vez mas el ASPECTO ARTISTICO del rock. La música como arte...en el afán de ser famosos y ganar dinero, se baja el nivel del intelecto hasta el subsuelo!!! Cada vez que escucho alguna entrevista a personajes de los grupos de mas convocatoria de la actualidad, siento verguenza ajena...pareciera que ninguno de estos tipos haya ido alguna vez a la escuela y si fueron, lo vivieron de manera tan rebelde?...conflictiva?...castradora?...estúpida tal vez?. El caso es que no le sacaron ningún provecho al hecho de estudiar, invocando una alienación que a estas alturas me resulta muy poco creíble.
Recuerdo cierta vez una entrevista a Litto Nebbia salida en la revista Pelo, en la època de Fuera del Cielo o por ahí, le preguntaban a Nebbia si no le parecía que sus textos se volvían un poco herméticos para la gente al utilizar palabras como "Hipocampo" por ejemplo, que tal vez no todos conozcan...Litto contestó que, si de esa manera obligaba a alguien a ver el significado en el diccionario, estaba cumplido el objetivo de su arte en el sentido más didáctico de hacer cultura y elevar el nivel intelectual de la gente. Me parece muy claro...actualmente, ocurre lo exacto contrario...todos se jactan de HABLARLE A LA GENTE DE LA MANERA QUE LA GENTE HABLA con palabras que puedan entender (??). Este argumento lo escuche en distintas situaciones y dicho de maneras distintas, pero el concepto era el mismo y presupone que se está sabiendo lo que la gente quiere...algo en lo que yo jamás creí, porque en el mundo, si uno sabe buscar HAY DE TODO Y PARA TODOS.
En otras palabras, como ellos creen (con cual presuntuoso y arrogante derecho???) que la gente es idiota, usan lenguajes de idiota. Pero lo que en realidad significa todo esto, traducido, es que hacen lo mas grasa que pueden POR MIEDO DE NO VENDER Y NO SER POPULARES.
Hagamos una pequeña analogía...antes, ir a un recital era como ir al cine a ver una buena película...ahora, ir a un recital es como ir a un partido de fútbol, y lo digo sin ánimos de desmerecer este popular deporte, sino en el sentido que se pasó del ejercicio intelectual más elevado, a la pasión (de multitudes) más visceral y animalesca.
De un extremo al otro...como siempre, la verdad suele estar en el medio.
Es mi humilde opinión de porque hay tanta mediocridad negándose permanentemente a sí misma, como bien dice Osvaldo.
Un gran abrazo
ESTEBAN
Osvaldo te mando este pequeño aporte que encontre releyendo algunas notas sobre el tema que planteas.
Realmente existe muchas opiniones tal vez encontradas pero creo que aun asi hay muchos puntos coincidentes entre quienes aun vemos al rock como una forma de vivir:
LA EXISTENCIA DEL ROCK
¨No es parte de una leyenda remota ni ocurrió en una galaxia muy lejana. En diciembre de 1943, mientras Londres sufría los más intensos bombardeos de parte de la aviación de Hitler, daba sus primeros berridos Keith Richards. Sí, el emblema del "sobreviviente" en el rock and roll, el Rolling más Stone, tan vigente hoy como ayer, es hijo directo de la Segunda Guerra Mundial.
Tanto él como sus co-generacionales (John Lennon, Bob Dylan, Pete Townshend) que harían historia a partir de los '60, crecieron al mismo tiempo que el mercado descubría un nicho antes inexistente: el de la juventud. inalterable: Hubo un esplendor salvaje en los días en que descubrimos en que nadie se podía sentar delante de nuestras narices porque estábamos en nuestro mundo, el que queríamos, y no en el de otros esperando lo que quisieran darnos". El sociólogo, Norman Birnbaum, contemporáneo él del Mayo del '68, intentó definir por entonces el significado de la naciente cultura juvenil: "Toda la nueva generación experimentó con nuevas formas de su propia sensibilidad, y se mostró crítica con respecto a una más vieja que pretendía exigir tan sólo sumisión a una rutina que no admitía crítica. Por una vez, la cultura de masas tenía un contenido que ni planteaba un escape total frente a la rutina, ni tampoco una sumisa capitulación ante ella, sino un poco de crítica".
Bienvenidos a la era rock, entonces, el marco ideal para sublimar los sueños de ese nuevo mundo, germinado en el pacto de paz que simboliza el horror de Hiroshima (o cómo aprendimos a vivir con la bomba atómica).
¿Cuál es el secreto que ha mantenido a la explosión sonora que marcó la aparición de la adolescencia como clase social en un estado de gracia tal que su carácter desafiante del pasado, presente y futuro se haya mantenido inalterable? Si el rock puede aún hoy sacarse chispas con el ocio envasado en microchips, la inmediatez de un mensaje espacial o la inmortalidad es sin dudas porque cobró vida casi sesenta años atrás en una forma sencilla (¡Awapbapaloobaboolapamboom! fue lo que gritó Little Richard) y supo resolver situaciones tan complejas como el traslado de un continente a otro. E incluso, con la capacidad de crear su propia franquicia para el mundo no-anglo: ese virus expandido por todo el planeta y que acá, desde hace ya cuarenta años, conocemos como Rock Nacional.
El rock como "cultura caníbal", Indio Solari dixit, lleva años intentando que su propia cola no se transforme en víctima de su voracidad. Hoy queda constancia de una rebeldía y empuje inicial devorado por el sistema que pretendía atacar. Pero mientras las bombas siguen cayendo aquí, allá y en todas partes, el rock sigue vivo. Y continua siendo un brutal alarido de vida, en estos tiempos de muerte
Hola Osvaldo... Tema complejo el qeu planteas... Como hoy me levanté conciliador, opino que el rock pendula, constantemente, enter lo conservador y lo rebelde... Como pendula, está vivo... ahora qué difícil que es encontrar cosas novedosas, que te abran la cabeza... realmente hay que ser un especialista para encontrar algo novedoso... La diferencia quizás es que en décadas pasadas había grupos rupturistas que a la vez eran masivos... como Pink Floyd o The Beatles... ahora es más difícil encontrar cosas masivas y rupturistas.
Abz.
Osvaldo llegué a tu blog gracias al mensaje que dejaste en el mío, y es así como entro en esta discusión, cuando hoy en día no se discute nada o casi nada, salvo honrosas excepciones. Más arriba hablan de la pila de 9 v (mamma mía!!! que horror y lo peor es que lo dice "no se me ocurre nada") y se habla de arte, en realidad creo que hablamos de un valor único en la historia del rock que es el autenticismo, y para ello nada mejor que leer a un coterráneo tuyo Sergio Pujol del cual tuve el agrado de ser alumno en la Facultad Libre de Rosario, en el seminario Rock y pensamiento, cualquiera de sus libros así como lo de Miguel Grinberg son herramientas fundamentales para entender un poco mas a este fenómeno que es la música de rock.
y dejo para lo último dos claros ejemplos contradictorios actuales Boom Bomm Kid y las Manos de Filippi, que con sus diferentes poesías (en el caso de las manos aunque sea "rante") son luces en la oscuridad actual.
un abrazo a vos y tus seguidores
marcos
de la isla flotante
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