11.14.2006

En el principio fue La Cueva. El movimiento en movimiento...

De ser un sitio de encuentro de músicos de jazz, la Cueva se fue convirtiendo en el primer lugar de Argentina, donde se comenzaban a nuclear los pioneros del rock nacional. Allí convergían el gordo Billy Bond, los hermanos Fatorusso de la banda uruguaya Los Shakers, Tanguito, Moris, Javier Martinez, Pajarito Zaguri, Miguel Abuelo, Litto Nebbia entre otros.

Señalo como de gran importancia, distinguir toda esta movida cuevera, de lo que comenzaba también a desarrollarse en la Argentina, bajo el mismo rótulo: música Beat, que consistía simplemente en un género simple que no complicaba demasiado al pensamiento pero que era especialmente apto para bailar. El incipiente movimiento de rock era partidario de una música que además de entrar por los oídos, ingresara en la cabeza, y no solamente por los pies. En este sentido se encuentra una de las ideas fuerza, que hicieran de las letras uno de los contenidos más importantes, y que por la misma razón se logró desmitificar esa idea de que el rock o el blues solamente podían cantarse en inglés. Entonado en un lenguaje poco comprensible, este género perdería la mayor parte de su sentido contestatario y revulsivo. Tampoco se podía cantar en español, diciendo todas esas cosas que a nadie les molesta y que refuerzan mucho más la alienación social. Es importante recordar que los grupos de música beat denominada comercial o complaciente, también cantaban en castellano, pero con un sentido completamente opuesto.

Las influencias musicales que formaron a estos pioneros creo que son fundamentales para entender la conformación de las distintas variantes que se fueron configurando a partir de ahí, aunque estoy convencido que hay un denominador común de todo ello. Ya que si bien Manal no fue lo mismo que Almendra, el sonido que iba a emerger después de pasados pocos años, por ejemplo con Billy Bond y la Pesada del Rock, Pescado Rabioso o Pappo´s Blues, para nombrar sólo algunos, iba a encontrarse en un punto de mucho mayor proximidad y convergencia. Intuyo que el sorprendente fenómeno que fueron Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota, generando un verdadero movimiento juvenil de masas, fue porque llegaron tal vez a ser los verdaderos herederos de aquella escena original, emparentada si bien no desde su inicio, con la legendaria y emblemática Cofradía de la Flor Solar, nacida en La Plata. En este sentido me parece de suma importancia el rastrear en la historia todo aquello relacionado a fusiones de músicos en diferentes bandas, ya que tras la disolución de Manal, Almendra y Los Gatos, vamos ver que muchos de sus integrantes iban a confluir en otras formaciones, donde a su vez iban a aparecer, nuevas caras de notable importancia. Para dar un ejemplo David Lebón, formó parte de Pappo´s Blues, Color Humano, Pescado Rabioso, La Pesada del Rock y Polifemo, para formar parte años después de aquella superbanda que se llamó Serú Girán, o un Moro que de haber sido el batero de Los Gatos, pasó a integrar Huinca, la Máquina de Hacer Pájaros y confluir también en Serú.

1 comentario:

23443243342324 dijo...

Espero que puedas rescatar mediante toda esta informacion un poco la conciencia escencial del rock.
Un abrazo