Para los que teníamos gustos más sofisticados, tal vez los Creedence
no eran la panacea de lo que uno buscaba como la mejor y más lograda música
progresiva. Creedence era escuchado por muchos, y tampoco faltaba en los bailes populares, en
donde la mayoría lo que buscaba era un
buen ritmo para la danza. Tampoco se podía considerar que lo que hacían era una
simple música comercial. Lo de la agrupación de los hermanos Fogerty era un
rock simple, pero no embelesado para vender más placas, era un sonido demasiado
digno, en el cual fluían desde el más puro rocanrol, hasta el blues y el rockabilly.
Con esa pinta de cowboys con jeans y camisas a cuadro, Creedence Clearwater Revival,
se ganaron en aquel tiempo un sitio inigualable, pero lo que más da para nombrarlos,
es que a lo largo de todas las generaciones que los precedieron, hoy siguen
teniendo un lugar. Ellos habían nacido en el Bayou.