6.08.2008

Una vuelta de tuerca











Desde un inicio este blog tuvo como intención dar testimonio de un fenómeno singular de la cultura argentina, que es el desarrollo a partir de los sesenta, de un muy importante movimiento cultural de rock. A medida de haberse engrosado una va dándose cuenta de tener una pata renga, y es que justamente la cultura rock no tiene patria, y que si bien la Argentina es un país donde el rock alcanzó un despliegue enorme, cuesta hablar de la singularidad local sin sentirse tentado a desarrollar ideas acerca de lo que ocurrió en otros sitios del planeta.
La idea de esta bitácora tampoco fue nunca la de hacer una historia, sino más bien la de esbozar trazos particulares que permitan rastrear rasgos de la subjetividad que emana de ser parte de una expresión de la contracultura.
Desde este momento rompemos la cárcel del espacio geográfico para comenzar a desarrollar la misma idea desde todos los lugares que nos fueron marcando a través del tiempo. Básicamente quiero decir que porque no hablar en este lugar del Delta Blues, o de la Psicodelia, o del Rock británico, o del Reggea jamaiquino, para decir sólo algunos ejemplos.
Es por esto que a partir de hoy el blog se llamará Berisso Blues a secas, es decir un blues que uno va construyendo en la vida, desde la visión particular de un habitante de una ciudad portuaria del Gran La Plata sobre la costa rioplatense.